104 años de nacimiento está cumpliento por estos días el legendario director de orquesta Georg Solti, quien hace parte de un trío de directores nacidos en 1912, junto a Erich Leinsdorf e Igor Markevich. Nació en Budapest como Georg Stein y se nacionalizó británico en 1972. Recibió su primera formación en la Academia Franz Liszt junto a figuras de la época como Zoltan Kodaly y Bela Bartok. A los 18 años empezó su trabajo como director asistente de la ópera húngara. En los años que precedieron a la Segunda Guerra Mundial 1936-37 fue asistente de Arturo Toscanini en el Festival de Salzburgo. Este encuentro sería decisivo para templar la personalidad del gran conductor en el que se convertiría.

En su trabajo como director se caracterizó por su versatilidad: ópera, música sinfónica y de cámara y grabaciones para el sello DECCA, representadas en 250 discos y 45 óperas completas. Fue director la Orquesta Sinfónica de Chicago, Orquesta Filarmónica de Londres, Concertgebouw de Amsterdam, Festival de Bayreuth, entre otras importantes agrupaciones. El comentarista musical Enrique Franco definició así en su momento la muerte de este gran director: "La desaparición de sir Georg Solti deja un gran vacío en muchas direcciones del hecho musical, compensado, en parte, por la valiosísima herencia de sus grabaciones, evocación del pasado inmediato y lección perdurable ante el futuro. Solti no fue sólo un magnífico conductor, sino un maestro en toda la más exigente significación del término".

EL MÚSICO DE LA SEMANA, octubre 18 a 31, 2:00 p.m.