Como parte de los espacios culturales que el Instituto Confucio Utadeo ofrece a sus estudiantes, a la comunidad tadeísta y a la ciudadanía en general, el jurista y novelista chino He Jiahong visitó Utadeo el pasado 29 de octubre. Allí impartió dos conferencias sobre ley, literatura y política anti-corrupción que brindaron una nueva mirada sobre la situación en el país asiático.
Jiahong es un experto en el campo del derecho criminal, quien contó su experiencia como escritor y abogado que combate el delito en su país. Actualmente es Consejero para la Corte Suprema Popular y la Procuraduría de la República Popular China y Director del Centro Anti-corrupción de la Universidad de Renmin.
En su conferencia “La ley como fuente para la ficción literaria”, el escritor relata cómo en su juventud vivió la Revolución Cultural (1966 – 1976), trabajando en una granja desde los 16 años. En ese lugar descubrió su pasión por la escritura e inició su camino para convertirse en literato. Allí escribió su primer poema y comenzó una de sus tantas novelas.
Sus inicios
Ocho años después, Jiahong regresa a Beijing para trabajar en una empresa de construcción como plomero, es allí donde conoce a su actual esposa. Ambos se enamoran, pero los padres de ella no están de acuerdo con que estén juntos por las diferencias sociales; sin embargo le ponen una condición a He para permitirles estar juntos: aprobar los exámenes de ingreso a la universidad. Este era un reto muy difícil de superar porque en esa época la cantidad de personas que querían iniciar sus estudios era inmensa, puesto que las universidades en China estuvieron cerradas durante los diez años que duró la Revolución Cultural.
Jiahong aprueba e inicia sus estudios en leyes en la Universidad de Renmin y posteriormente hace una maestría en la Universidad de Northwestern en Chicago, Estados Unidos. A su regreso a China crea un grupo de investigación sobre los errores en los juicios en ese país asiático.
Estas investigaciones se convirtieron en una fuente de inspiración para la creación de sus novelas que giran en torno al detective Hong Jun, un personaje muy original, cuyas historias están basadas en los casos descubiertos a través del trabajo de He.
En la conferencia "La lucha contra la corrupción en China”, He recordó que siempre “usa dos etiquetas: una, de escritor, y la otra, de jurista” y que por esto “muchas veces tengo ideas novelescas acerca de la ley”. También hizo un recuento de diversos artículos y entrevistas que le han hecho en reconocidos medios como el Financial Times, The Economist y el China Daily, entre otros.
La corrupción en los deportes
He Jiahong es fanático del fútbol, razón que lo ha comprometido a liderar la lucha contra la corrupción dentro de los deportes. Ha participado en convenciones en distintos países donde las discusiones alrededor de este tema le han hecho acercarse más a la ética en los deportes.
Además de haber estado involucrado en las campañas anti-corrupción en su país, también ha sido nombrado miembro del comité ético de la Asociación China de Futbol, y en el 2017, fue nombrado asesor del comité ético de la FIFA.
Tigres y moscas
De un tiempo para acá, en China se está librando una fuerte campaña anticorrupción. A los funcionarios de altos cargos se les llama "tigres” y a los de cargos más bajos, “moscas”, de aquí sale el nombre de las campañas “Pegándole a los tigres” y “Pegándoles a los mocas” que buscan atrapar a más funcionarios corruptos. Sin embargo, esto solo es una pequeña parte de toda la corrupción que hay dentro del sistema que aún no ha sido destapada.
Prevención
China se ha planteado la pregunta de si es mejor concentrarse en el castigo o en la prevención del crimen, pues en esa nación una forma de prevenirla es que el castigo sea muy severo, como la pena de muerte. Sin embargo, no es una solución viable, pues solo el 10% de los casos son descubiertos y el resto queda en la impunidad.
Actualmente He Jiahong continúa comprometido con sus investigaciones y la literatura. Además estudia las diferentes formas de combatir la corrupción en distintos aspectos: “Yo tengo dos identidades: la de escritor y la de jurista. El de escritor la utilizo con juristas y la de jurista con escritores”.
