“Escuchen a este niño. Algún día el mundo hablará de él”: Mozart tras escuchar a Beethoven
¡La música y las artes nunca se apagarán! Por eso, desde el Centro Cultural Utadeo presentamos #CulturaALaCasa, una iniciativa para aprender, disfrutar y conocer en los días de aislamiento.
El 2020, además de bisiesto, es el año donde se conmemoran 250 años del natalicio del musico alemán Ludwig van Beethoven, de quien se dice, nació el 16 de diciembre de 1770, en el número 20 de la calle Bonngasse, en Bonn. No se conoce la fecha exacta del nacimiento de Beethoven, pero se sabe que fue bautizado el 17 de diciembre de 1770. De acuerdo con los requisitos eclesiásticos de la época, estos exigían que los recién nacidos fueran bautizados dentro del día siguiente al nacimiento, así que seguramente nació uno o dos días antes.
La casa de Bonn donde nació Beethoven, convertida en museo.
Vivió una infancia dura, un amor imposible y se quedó sordo, pero siempre mostró un gran virtuosismo musical que lo convirtió en un músico eterno a partir de sus composiciones que han sido utilizadas en múltiples escenarios, películas y que se han convertido en símbolos, como la Sinfonía Nº 9 en re menor, op. 125, conocida también como "Coral".
Aquella sinfonía fue la última que el compositor alemán completó, siendo una de las obras más populares en la música y el arte. El último movimiento de esta se conoce popularmente como “El himno de la alegría”, reconocida por su coral y que, para la época, fue sorprendente; hoy en día es un símbolo de libertad.
Al igual que Mozart, Beethoven fue un niño prodigio. Desde los 10 años dio conciertos donde la gente pagaba por escucharlo tocando el piano. Detrás de él siempre tuvo el impulso de su padre, Johann, que hizo todo para que este se convirtiera en el nuevo Mozart.
Beethoven creció en una época donde la ilustración estaba en su máximo apogeo, dando paso a la Revolución Francesa. La humanidad estaba a punto de pasar la página para enfrentarse al nacimiento de una verdadera civilización.
En la adolescencia de Beethoven, Mozart estrenó su ópera La flauta mágica y Joseph Haydn presentó sus Cuartetos de cuerda rusos. En ese ambiente musical, “Beethoven inició estudios con Christian Gottlob Neefe, un músico de treinta años cautivado por la música barroca de Bach”, señala el periodista José Segovia en el artículo “Los misterios de Beethoven”.
Beethoven, 1804
Fue a la edad de 16 años cuando Beethoven se encontró por primera vez con Mozart, quien tenía 31. Ocurrió en 1787 en Viena, Austria, donde Mozart gozaba de una reputación como uno de los mejores músicos vivos de Europa. El Conde Waldstein, un noble alemán, escribió una carta de recomendación con la cual Beethoven llegó a la residencia de Mozart, quien se encontraba enfermo por esos días.
Según cuenta Juan Carlos Garay en su texto “Las tres claves del estilo Clásico”, Mozart le dijo a Beethoven: “Toca algo”. Acto seguido, el joven alemán tocó los primeros compases del "Concierto para piano en Do menor" de Mozart: “Eso lo puede tocar cualquiera. Toca algo propio”, le dijo Mozart ofuscado. Beethoven tocó una de sus composiciones. Cuando terminó, Mozart corrió a la sala, donde se encontraban su esposa y unos amigos, y les dijo: “Escuchen a este niño. Algún día el mundo hablará de él”, reseña Garay en su texto.
Beethoven quería tomar clases con Mozart o Haydn, pero a las dos semanas de estar en Viena su madre enfermó y este tuvo que regresar a Bonn. Cuando Beethoven volvió a Viena años más tarde, Mozart ya había muerto.
