En su columna de opinión de esta semana para el diario El Espectador, José Fernando Isaza, Consejero de Utadeo, habla sobre los "Iluminados", personas que se creen destinados a ser superiores y con una misión en la vida que tratan de cumplir incluso sobrepasando reglas, modificanco leyes y acomodando la realidad para su propio beneficio.
"La mayor tragedia para una sociedad es que alguno de sus iluminados adquiera poder o control político. Los iluminados creen que un ser superior les encomendó una misión en la vida y para realizarla no tienen ninguna limitación" señala Isaza, al tiempo que anota que "Si las leyes los restringen, consideran que ellos no están obligados a cumplirlas, dividen el mundo entre los que están con ellos, los buenos, y los que no los acompañan, los malos, y si consideran necesario eliminarlos para poder cumplir su misión no tienen escrúpulo en hacerlo".
Menciona que este tipo de personalidades son tan egocéntricas en su pensamiento que "No exponen políticas; proclaman doctrinas que sus fieles aceptan sin ninguna discusión. El culto a la personalidad hace que su imagen sea más importante que cualquier idea. Consideran que el lugar adecuado para los opositores a su plan superior es la cárcel o la tumba. Confunden la seguridad del Estado con la seguridad de su movimiento mesiánico".
Da algunos ejemplos de gobernantes que encajan en esta definición "La historia es pródiga en ejemplos de iluminados. Pol Pot, en Camboya, asesinó a casi la quinta parte de la población que se oponía a su plan de un paraíso socialista sin clases y sin moneda...Hitler consideraba que algún dios germánico o cristiano le había dado la misión de crear el imperio alemán...Stalin y Franco no escapan a la clasificación de iluminados. Los fusilamientos que siguieron al triunfo de la Revolución cubana hacen pensar que Fidel Castro se sentía iluminado. Con alta probabilidad, Mao encaja en este grupo".
Y cierra su texto haciendo una recomendación "Para el país sería un gran retroceso que un próximo presidente fuera un iluminado o algún fiel seguidor de algún miembro de esta categoría. No se puede correr el riesgo de reactivar guerras o de clasificar a los ciudadanos en buenos y malos, sin matices, con todas las consecuencias que esto conlleva".