La caligrafía es un arte. Eso lo reafirmamos hoy con la demostración del profesor Luis Eduardo Garzón y en La Brújula, bajo el sol, terminamos con las lecciones express de chino para curiosos y el karaoke.
Tinta china, corazón, papel de arroz y el maestro Luis Eduardo Garzón
En el II Festival Cultural de China también tenemos tiempo para el arte, por eso el maestro Luis Eduardo Garzón dio una charla personalizada de Caligrafía. El primer paso fue aprender qué materiales se necesitan: papel de arroz, tinta china, mortero, agua y un pincel hecho especialmente para este arte. Todo listo, gracias a la organización del equipo del Instituto Confucio UTadeo. Lo único que el Maestro exigió por parte de los participantes fue sentir lo qué iban a poner en el papel.
Lo especial de la caligrafía o lo que en occidente llamamos “la escritura bonita” no es solo la técnica. El mensaje y la emoción que le ponga el “escritor” son aspectos vitales para que deje de ser un asunto de idioma y se convierta en arte. Cada uno de los asistentes comprendió que debía sacar la caligrafía desde su corazón, y aunque esto no es tan fácil para todos, hay otra cosa indispensable. Ante el asombro de los participantes, el Maestro explicó que la caligrafía involucra todo el cuerpo y hasta el punto más pequeño lleva un movimiento especial.
Fotografía Instituto Confucio
“¿Una persona china puede entender todos los tipos de caligrafía?”, fue una de las preguntas que hicieron los asistentes. La respuesta es no, el Maestro dijo que un experto en caligrafía puede manejar hasta 40.000 caracteres, mientras, una persona normal maneja 3.000. Esto no hizo que los participantes se desanimaran, por el contrario, todos se concentraron en la demostración del maestro Garzón, quien escribió el nombre de cada uno y un poema especial a nuestro Instituto Confucio UTadeo por el 10° Aniversario de los Institutos que existen en el mundo.
Se acabó, pero la experiencia es inolvidable
El cierre del Karaoke y de las Lecciones Express de Chino para Curiosos fue todo un éxito. A diferencia del miércoles, el sol nos acompañó durante el día, favoreciendo a que los estudiantes y los funcionarios de la UTadeo se acercaran. Claro, no todos cantaron, pero los que fueron a echar un vistazo corearon las canciones de los que se atrevieron a tomar el micrófono, y aprendieron las nuevas palabras que enseñó la profesora Dai Xiumin.
A la hora del canto, el idioma no fue excusa para que los participantes se animaran y disfrutaran de una tarde agradable. Elizbeth Torres Tenorio, Decana del programa de Comercio Exterior, se dejó contagiar por esta excepcional muestra cultural y se aventuró a cantar en compañía de Zhang Ping, otra de nuestras profesoras.
Na Ziwei, The moon represents my heart y Dui mian de nu hai kan guo lai fueron canciones interpretadas por los estudiantes del Instituto Confucio, que no podían faltar en esta ocasión, pero no fueron las únicas, también se cantaron otros temas de un tono más romántico y otros más alegres, que alentaron al público.
En nuestras lecciones express de chino para curiosos, entusiasmados por el idioma, repasaron los números, los meses y las fechas en general, además de aprender cómo se dice el día en que nació cada uno y la canción del cumpleaños.
Fotografía CARLOS MARTÍNEZ/ Oficina Audiovisuales
“Zhù nǐ shēng rì kuài lè…” repitieron los espectadores que llenaron La Brújula. Aunque al comienzo, algunos no se veían muy convencidos de lo que estaban escuchando, ninguno se dio por vencido, repitieron, repitieron y repitieron hasta mejorar su pronunciación.
La actividad terminó con la explicación de los animales del horóscopo, lo que cautivó aún más la atención de los asistentes que querían conocer cuál era su animal y cuales son sus virtudes de acuerdo su año de nacimiento. El evento cerró con broche de oro y todos los curiosos salieron satisfechos diciendo las nuevas palabras que aprendieron.
Así terminaron estas dos actividades que divirtieron a los tadeístas durante tres días. Pero aún no acabamos formalmente. El viernes 25, tendremos una exhibición deportiva de jianzi y conoceremos a los ganadores de los concursos Confucio es Tadeísta y Una verdadera cena china. Estos últimostendrán el honor de a compartir una cena tradicional china, con las profesoras del Instituto en uno de los más lujosos restaurantes de esta especialidad en la ciudad, el restaurante Cooking Taichi.
¡Los esperamos!
