Una de las actuales denuncias del candidato del Centro Democrático, Iván Duque, es que los empresarios pagan demasiados impuestos. Sin embargo, el profesor emérito de Utadeo, Salomón Kalmanovitz, en su columna de opinión en El Espectador, basado en el estudio que Hernán Rincón y Martha Delgado realizaron para el Banco de la República, destaca que los trabajadores son los que aportan más al fisco, por encima de los empresarios.
Según el economista, la tasa que recae sobre los salarios está por encima de la de aquella sobre el capital, desde el año 1994 y hasta el 2015. Así, mientras las tasas de ley y las efectivas son diferentes, llegando incluso a una tasa combinada del 40%, lo cierto es que se dan cuantiosos gastos de consumo e ingresos del trabajo y de capital que no pagan impuestos o pagan menos de lo debido, “a base de beneficios tributarios, elusión y evasión, de los que sabe mucho el jefe de Duque".
De este modo, resalta Kalmanovitz, es importante aumentar el impuesto a los más ricos, y no reducirlo, como lo propone Iván Duque en su plan de gobierno: “Si el capital extranjero decidiera invertirse en los países que cobran menos impuestos a la renta, Colombia sería uno de los países más atractivos del mundo. No obstante, es uno de los más rezagados. Otros países cuentan con recursos humanos educados, centros de investigación e innovación, infraestructuras adecuadas, mercados internos grandes y expansivos, gobiernos fuertes y eficientes, y seguridad”, aduce Kalmanovitz, quien recuerda además que los tributos sobre el consumo aumentaron del 10,4% al 12%, mientras el tributo a los salarios aumentaron del 17% al 22% durante la administración de Álvaro Uribe.
Ante ello, el columnista enfatiza que Duque ha prometido irresponsablemente no seguir la regle fiscal, al tiempo que la reducción de impuestos genera más incógnitas que respuestas.
