El presidente de Corea del Sur se ha mostrado esperanzado en que los asuntos históricos no empeoren las relaciones entre su país y Japón.
Moon Jae-in hizo estos comentarios a la prensa en su vuelo a Nueva Zelanda después de la cumbre del G20 en Argentina. Dijo que las disputas históricas no deberían socavar la cooperación entre Japón y Corea del Sur. Afirmó que los dos países deberían centrarse en el futuro de sus relaciones.
Es la primera vez que Moon habla públicamente de las relaciones bilaterales desde que en octubre el Tribunal Supremo de Corea del Sur ordenó a una compañía japonesa el pago de compensaciones a coreanos que trabajaron para firmas niponas durante la Segunda Guerra Mundial. El Gobierno japonés protestó enérgicamente la decisión de la corte.
Moon también habló sobre su reunión con el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, al margen de la cumbre del G20. Al respecto dijo que Trump le pidió que comunicara un mensaje al líder norcoreano Kim Jong Un.
El mensaje de Trump, según Moon, transmite su aprecio a Kim y muestra su esperanza de que el líder norcoreano implemente el resto del acuerdo bilateral. Moon también dijo que Trump comunicó a Kim que le gustaría ayudarle a conseguir sus objetivos.
El presidente surcoreano hizo hincapié en que Trump apoya la planeada visita de Kim a Seúl. El Gobierno surcoreano quiere que el líder de Corea del Norte realice la visita antes de que finalice el año.