Hasta que no reconozcamos nuestro mestizaje, no habrá paz en nuestro territorio
En el artículo Notas pedagógicas para una sociedad en crisis (V), el profesor López se refiere al sistema educativo colombiano, que prescinde de los conocimientos de nuestros ancestros indígenas, de lo que poco se habla en primaria y secundaria, debido a que hemos adoptado un modelo eurocentrista, "impuesto por sus colonos, para mantener su hegemonía y privilegios".
Además, señala que es, quizá, la falta de reconocimiento de nuestro mestizaje lo que origina que este sea un país sumido en la violencia. "Hasta que no reconozcamos nuestro mestizaje y revaloremos lo que ello significa en su más alta apreciación y sentido, no habrá paz en nuestro territorio ni en nuestros corazones", comenta.
Para el docente, las ideas denigrantes y peyorativas sobre nuestros indígenas se han reforzado con el tiempo, a tal punto que "indio, ha sido pues, sinónimo de salvaje, miserable, pobre e inculto, por no decir más. Y qué injustos adjetivos, que fueron pensados por las mentes de la supuesta civilización, -más bien un empeño civilizador que no civilizado-, pues sus prácticas traicionaron todo lo que pretendían sus principios: Inquisición, brutalidad, esclavitud, etc".
En el artículo también una de las frases célebres del libro Lo que saben los wayuu, del profesor emérito Fernando Urbina Rángel y editado por Utadeo:
“La enseñanza de todas las disciplinas en Colombia deberían empezar por los elementos del pensar aborigen".