Revive la última ceremonia de grados de este año

“El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles es lo inalcanzable. Para los temerosos, lo desconocido. Para los valientes es la oportunidad”

Víctor Hugo

 

A sus 53 años, para Roberto Suárez, egresado del programa de Cine y Televisión de Utadeo, obtener su título profesional significa un sueño hecho realidad. Hace algunos años había desarrollado su carrera como tecnólogo en Cine y Televisión, y tras homologar y estudiar tres semestres adicionales, logró escalar un peldaño más en su desarrollo personal: “los sueños no terminan, no tienen edad, ni distingo de personas, puedes hacer tus sueños realidad pues estás vivo”, destaca Suárez en medio del júbilo que amerita una ceremonia de grados que, en esta última edición del año, concedió el título a 116 personas, 114 personas de pregrado, uno de maestría y uno de especialización.

Pero el júbilo también lo demuestran quienes, rompiendo en lágrimas de felicidad y abrazando a sus seres queridos, ven en su título profesional una nueva vida y cumplimiento de sus metas. Este es el caso de Carlos Ramírez, de quien podría decirse es un tadeísta hasta los tuétanos, pues desde hace 15 años es administrativo de la Universidad, actualmente es integrante de la Dirección de Mercadeo, y hoy es egresado del programa de Diseño Industrial.

Carlos actualmente trabaja en un proyecto que tiene como objetivo prevenir el abuso y el maltrato infantil, a partir de modelos basados en el diseño: “el grado significa romper una barrera de prejuicios y sesgos que una persona tiene. El diseño que aprendí en la Tadeo me está enseñando a enseñar a jóvenes desde el baile, el dibujo y la plastilina y mostrarles que sí se puede prevenir el abuso, eso es lo que hoy me tiene feliz”.

Para Carlos, el ADN de ser tadeísta significa ser único: “antes creaba, pero ahora, después del proceso en la academia, entiendo que para crear hay que creer”, añadió.

Por su parte, Amaez Bejarano, egresada del programa de Diseño Gráfico, experimenta lo que podría denominarse como una doble felicidad, luego que en el mes de julio de este año obtuviera su doble titulación en el reconocido IED de Barcelona, gracias al convenio de cooperación que tiene esta universidad española con Utadeo: “Estos dos diplomas abren muchas puertas y salir de Utadeo es un reconocimiento muy grande”, sostiene la graduada, quien actualmente trabaja en el equipo del Festival El Dorado.

 

Tras la búsqueda de un sello inconfundible

En su discurso de felicitación a los graduandos, la rectora de Utadeo, Cecilia María Vélez, resaltó que culminar la carrera profesional es una de las experiencias mas importantes de la vida, pues el llamado ahora es a ser influyentes para transformar las realidades de la sociedad: “Ustedes, sin lugar a dudas, imprimirán un sello inconfundible de calidad a sus proyectos”, enfatizó la directiva, quien recordó que los pilares del tadeísta están en el respeto y la tolerancia hacia el otro, así como la capacidad de imaginar nuevos mundos posibles.

Rectora de Utadeo, Cecilia María Vélez

En segundo lugar, Edgar Ruiz, director de los programas de Ingeniería de Sistemas e Ingeniería en Automatización, citando al reconocido literato francés Víctor Hugo, señaló que el futuro para los valientes es una oportunidad. “El mundo necesita profesionales que ven con agudeza los desafíos que enfrenta la humanidad”, agregó, al recordar que nuestros graduandos tienen el reto de ofrecer respuestas a problemáticas tales como la polarización social y política y la cada vez acentuada erradicación de la vida en el planeta. El directivo les recordó que ellos serán los encargados de labrar el camino hacia el desarrollo y la equidad social, sin olvidar, ante todo, lo humano como eje transversal del quehacer profesional.

Angie Arévalo

Finalmente, Angie Arévalo, egresada del programa de Derecho, en sus palabras a sus compañeros graduandos, señaló que la Universidad inculcó en sus vidas la perseverancia y el discernimiento de los bueno y lo malo bajo argumentos sólidos. Recordó a las familias presentes que “el legado más grande que nos pueden dejar es la educación”, al tiempo que agradeció a los profesores por cambiar la forma de pensar y ver el mundo.

Los maestros Sebastián Sandoval y Miguel Ángel Guevara amenizaron la ceremonia

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Revive la última ceremonia de grados de este año
Viernes, Diciembre 6, 2019
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En total, obtuvieron su título 116 tadeístas, 114 en la modalidad de pregrado, uno en especialización y otro en maestría. Hablamos con sus protagonistas y nos contaron lo que significa este inolvidable momento en el que recordamos que nunca se debe dejar de soñar.
Fotografías: Alejandra Zapata

“El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles es lo inalcanzable. Para los temerosos, lo desconocido. Para los valientes es la oportunidad”

Víctor Hugo

 

A sus 53 años, para Roberto Suárez, egresado del programa de Cine y Televisión de Utadeo, obtener su título profesional significa un sueño hecho realidad. Hace algunos años había desarrollado su carrera como tecnólogo en Cine y Televisión, y tras homologar y estudiar tres semestres adicionales, logró escalar un peldaño más en su desarrollo personal: “los sueños no terminan, no tienen edad, ni distingo de personas, puedes hacer tus sueños realidad pues estás vivo”, destaca Suárez en medio del júbilo que amerita una ceremonia de grados que, en esta última edición del año, concedió el título a 116 personas, 114 personas de pregrado, uno de maestría y uno de especialización.

Pero el júbilo también lo demuestran quienes, rompiendo en lágrimas de felicidad y abrazando a sus seres queridos, ven en su título profesional una nueva vida y cumplimiento de sus metas. Este es el caso de Carlos Ramírez, de quien podría decirse es un tadeísta hasta los tuétanos, pues desde hace 15 años es administrativo de la Universidad, actualmente es integrante de la Dirección de Mercadeo, y hoy es egresado del programa de Diseño Industrial.

Carlos actualmente trabaja en un proyecto que tiene como objetivo prevenir el abuso y el maltrato infantil, a partir de modelos basados en el diseño: “el grado significa romper una barrera de prejuicios y sesgos que una persona tiene. El diseño que aprendí en la Tadeo me está enseñando a enseñar a jóvenes desde el baile, el dibujo y la plastilina y mostrarles que sí se puede prevenir el abuso, eso es lo que hoy me tiene feliz”.

Para Carlos, el ADN de ser tadeísta significa ser único: “antes creaba, pero ahora, después del proceso en la academia, entiendo que para crear hay que creer”, añadió.

Por su parte, Amaez Bejarano, egresada del programa de Diseño Gráfico, experimenta lo que podría denominarse como una doble felicidad, luego que en el mes de julio de este año obtuviera su doble titulación en el reconocido IED de Barcelona, gracias al convenio de cooperación que tiene esta universidad española con Utadeo: “Estos dos diplomas abren muchas puertas y salir de Utadeo es un reconocimiento muy grande”, sostiene la graduada, quien actualmente trabaja en el equipo del Festival El Dorado.

 

Tras la búsqueda de un sello inconfundible

En su discurso de felicitación a los graduandos, la rectora de Utadeo, Cecilia María Vélez, resaltó que culminar la carrera profesional es una de las experiencias mas importantes de la vida, pues el llamado ahora es a ser influyentes para transformar las realidades de la sociedad: “Ustedes, sin lugar a dudas, imprimirán un sello inconfundible de calidad a sus proyectos”, enfatizó la directiva, quien recordó que los pilares del tadeísta están en el respeto y la tolerancia hacia el otro, así como la capacidad de imaginar nuevos mundos posibles.

Rectora de Utadeo, Cecilia María Vélez

En segundo lugar, Edgar Ruiz, director de los programas de Ingeniería de Sistemas e Ingeniería en Automatización, citando al reconocido literato francés Víctor Hugo, señaló que el futuro para los valientes es una oportunidad. “El mundo necesita profesionales que ven con agudeza los desafíos que enfrenta la humanidad”, agregó, al recordar que nuestros graduandos tienen el reto de ofrecer respuestas a problemáticas tales como la polarización social y política y la cada vez acentuada erradicación de la vida en el planeta. El directivo les recordó que ellos serán los encargados de labrar el camino hacia el desarrollo y la equidad social, sin olvidar, ante todo, lo humano como eje transversal del quehacer profesional.

Angie Arévalo

Finalmente, Angie Arévalo, egresada del programa de Derecho, en sus palabras a sus compañeros graduandos, señaló que la Universidad inculcó en sus vidas la perseverancia y el discernimiento de los bueno y lo malo bajo argumentos sólidos. Recordó a las familias presentes que “el legado más grande que nos pueden dejar es la educación”, al tiempo que agradeció a los profesores por cambiar la forma de pensar y ver el mundo.

Los maestros Sebastián Sandoval y Miguel Ángel Guevara amenizaron la ceremonia
Fotos

Reconocimiento personería jurídica: Resolución 2613 del 14 de agosto de 1959 Minjusticia.

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