Soluciones bio. Así fueron las propuestas de la más reciente edición de Utadeo Market
Empaques que son biodegradables, stands que revolucionan la manera de exhibir los productos y estrategias de mercadeo que llevan al impacto y la responsabilidad social por parte de las empresas en sectores tan diversos como los alimentos, las bebidas, aseo y comida para mascotas, fueron el común denominador de las doce propuestas que se presentaron como parte de la versión número veinte de Utadeo Market, que, a lo largo de casi diez años, se ha convertido en un evento propio de la identidad tadeísta en términos de merchandising y promoción de ventas, según lo destaca Mónica Peñalosa, profesora de la Escuela de Administración, Contaduría y Mercadeo de Utadeo y quien coordina este evento.
“Estamos haciendo un muy buen trabajo formativo, pues no son proyectos que se quedan para el semestre sino que impactan el mundo empresarial, y eso es muestra de que estamos formando profesionales integrales, con una visión de responsabilidad social, y en segundo lugar, que le están aportando a cambiar la manera de ver las cosas en el país”, asegura Fernando Locano, director de esa escuela.
A pocos meses de cumplir 50 años, el programa de Mercadeo ha encontrado en estos espacios una manera de basar su identidad en el consumo responsable y en la generación de productos ambientalmente amigables y de alto impacto, como un distintivo de la formación de los nuevos profesionales de este ramo, quienes, a su vez, se caracterizan por tener un espíritu innovador y habilidades en lo que a consultoría de Mercadeo se refiere: “Estas propuestas son proyectos reales, que tienen en cuenta la responsabilidad social, los costos y hay emprendimientos. Estos proyectos están listos al nivel de la consultoría”, agrega Peñalosa.
Mateo Silva, Diana Reina y Sebastián Galindo
Ideas que impactan a las empresas y a la sociedad
Si usted tiene mascotas, recordará lo complicado que puede ser comprar snacks individuales para perros. Los cabanos para estos amigos peludos tienen un olor que al olfato humano es desagradable. Las estudiantes María Fernanda Chaparro y Diana Guzmán introdujeron una novedosa alternativa para el empaque individual de este producto, a muy bajo costo, a partir del diseño de cajas elaboradas con cartón reciclable. De esta manera Crokim, como se llama la propuesta, se convierte en un producto fácil de llevar y en un sano complemento para la comida de los perros.
Por el lado de las bebidas, Yolima Guzmán y Yenny Perdomo rediseñaron la imagen de la tradicional marca Doña Panela, buscando ampliar el público objetivo de este producto a deportistas de alto rendimiento, aprovechando las cualidades energéticas que tiene la panela. La propuesta se basó en un empaque individual en forma triangular que puede ser destapado fácilmente, al tiempo que es sostenible, pues está fabricado en papel reciclable.
Campaña + fuerte: Yolima Guzmán y Jenny Perdomo
Otro grupo de tadeístas presentó una forma revolucionaria de exhibir cervezas de bajo costo que usualmente se encuentran en grandes superficies. En forma de barra de bar, diseñada a partir de madera orgánica, los estudiantes plantearon posicionar una marca de cerveza alemana que es poco conocida en nuestro país, dado que su distribución, hasta ahora, se hace a través de pacas. La apuesta también se centra en darle otra experiencia de consumo al público, pues, como lo advierten, la idea es mostrar que esta bebida se puede acompañar con cualquier alimento y en todas las comidas.
Pero las propuestas van más allá del empaque. Este es el caso de “Tardes de onces”, una propuesta de responsabilidad social empresarial diseñada para la marca San Jorge, en su segmento de mermeladas, que busca posicionar en las nuevas generaciones el uso de este producto en sus comidas cotidianas. La idea, como lo destaca Daniel Gómez, es impactar a 100 niños en 100 tardes, para un total de 10.000 menores, al tiempo que sus padres conocen otras formar de brindar nutrición a los más pequeños en el hogar. La forma de financiar el programa se da a partir de la inversión del 10% de las ventas obtenidas con la nueva presentación del producto, diseñada por los tadeístas, que consiste en un empaque que reemplazaría el tradicional sachet, usando plástico biodegradable tridimensional, es decir, con tres secciones de 200 gramos que permiten la recarga de las mermeladas.
