Subiendo un peldaño en la escalera de los sueños. Así se vivió la más reciente graduación de posgrados en Utadeo
Para Melissa Pacheco, el 22 de noviembre fue una fecha especial, pues para ella significaba estar un paso más cerca de su sueño familiar, el de crear un hotel en Santa Marta, su ciudad natal, en compañía de su padre y hermanos, quienes muy puntualmente, a eso del medio día, asistieron a la ceremonia de graduación en el Auditorio Fabio Lozano, en la que 49 tadeístas obtuvieron su título de especialistas y magísteres.
Esta diseñadora gráfica, y ahora especialista en Gerencia de Mercadeo, considera que su paso por la Universidad fue gratificante, y que por lo pronto, aplicará todo lo visto en este programa para hacer el diseño de la estrategia de marketing y de comunicaciones, así como la definición del manual de imagen de su emprendimiento, cuya sede ya se está construyendo: “Los profesores son de alta calidad y me dieron las bases que necesito para realizar nuestro sueño familiar”, señala la tadeísta.
Melissa Pacheco, una de nuestras graduadas, estuvo acompañada de su hermano durante la graduación
Otra muestra viva de que los sueños de nuestros estudiantes, egresados, pero también funcionarios se cumplen, es el hecho de ver a aquellas personas que han encontrado en la Universidad no solo un lugar para su crecimiento laboral, sino también como su lugar de formación profesional. Este es el caso de Yinny Marcela Blanco Rubiano, quien desde hace cuatro años trabaja en nuestra Universidad en la Dirección de Desarrollo Organizacional, y en esta ceremonia de graduación recibió su título como magíster en Relaciones Internacionales.
“Para mi es una bendición porque la universidad ha apoyado mi crecimiento personal, profesional y espiritual. Aquí me brindan calidad de vida y he tenido la fortuna de contar con un excelente trabajo donde también he crecido y he tenido la posibilidad de estudiar. Estudiar una maestría es un gran orgullo, pues solo el 4% de los colombianos cuentan con ella, y pues tener el apoyo de la Universidad a través de una beca es una bendición”, señaló emocionada la funcionaria, pues considera que este nuevo paso es la oportunidad para mejorar no solo su calidad de vida, sino también la de sus padres e hijo.
Como lo indica esta ingeniera industrial y especialista en investigación, volver a la academia fue todo un reto pero también es de las mejores decisiones que ha tomado: “cuando uno quiere y se pone metas no hay nada difícil. El reto es cumplir los sueños”.
Yinni Marcela Blanco también estuvo acompañada por sus padres, hijo, amigos y profesores de la Maestría en Relaciones Internacionales
En medio de risas, sueños por cumplir, y como siempre acompañados de la familia, en un retrato para la posteridad con hijos, pareja, padres y amigos, nuestros tadeístas escalaron un peldaño de cara a la cima de sus sueños, indicando una vez más que estos, al igual que los pequeños aviones azules de papel que se ondearon por el Auditorio Fabio Lozano, también pueden volar más alto.
