Científicos de la Academia China de las Ciencias en Wuhan, China, realizaron un estudio en el 2015 con el que determinaron que el cerebro de los adolescentes adictos a Internet podría experimentar cambios similares a los que sufren las personas que consumen regularmente alcohol o ingieren drogas alucinógenas.
La investigación se realizó con base en resultados de resonancias magnéticas a 0 hombres y mujeres de 14 a 21 años, de los cuales 19 habían tenido un diagnóstico de desorden de adicción a Internet.
Los resultados que arrojó la investigación hallaron contrastes y parecidos entre ambos grupos focalizados en la zona del cerebro asociada a los procesos emocionales, las habilidades de pensamiento ejecutivo y el funcionamiento cognitivo.
Lo realmente asombroso del análisis fue el parecido que tiene el fenómeno que experimenta el cerebro de la gente alcohólica, drogadicta o con otro desorden de control de impulso, ya que es similar al que es percibido por el cerebro en el momento de enfrentarse a una adicción por la internet.
Este tipo de adicciones generan un comportamiento que desgasta la mielina, sustancia que cubre y protege las fibras neuronales; el daño de esta puede afectar la comunicación neuronal.
Para concluir, la ciberadicción es considerada como no química que involucra la interacción hombre-máquina, una situación a la cual se enfrentan los adolescentes en el diario cotidiano, estas adicciones no sólo afectan la parte psicológica interna del dependiente, también conlleva a alejarse de una sociedad física, de tener un contacto social con personas del entorno y en ocasiones refugiar los problemas en el uso inadecuado de la internet.