Un oso polar se encuentra con un perro de trineo atado a una correa en algún frío rincón de Manitoba (Canadá). En lugar de comérselo, decide sentarse a su lado y acariciarlo.
La peculiar escena se ha vuelto viral en pocos días y ya tiene más de 200 mil vistas en YouTube.
Sin duda es una de las mejores escenas que nos dejara este 2016.