Expertos de la actividad paranormal afirman que la mayoría de manifestaciones fantasmales y fenómenos poltergeist que son los objetos impulsados por una fuerza invisible, sombras o sonidos sin explicación lógica, son productos de la mente humana. Ya que la mente humana tiene la capacidad de convertirse en un portal entre el “más allá” o incluso que las entidades utilizarían nuestros propios pensamientos para materializarse.
El Dr. Owen, creo un grupo de ocho personas donde ninguno tenía capacidades psíquicas, el grupo estaba conformado por la esposa del Dr. Owen, que fue la ex presidenta de una organización para personas con alto coeficiente intelectual, un diseñador industrial, un contable, un ama de casa, un estudiante de sociología, y un psicólogo llamado Dr. Joel Whitton también asistió a muchas de las sesiones del grupo en calidad de observador.
Así mismo el grupo empezó con su trabajo de crear un supuesto fantasma, éste era un noble inglés del siglo XVII llamado Philip Aylesford, de forma rápida crearon su vida personal, éste era un hombre casado pero que tenía un apasionado romance con una gitana, de la misma forma en la historia se relata que su esposa se enteró y empezó a practicar a la mujer gitana una serie de rituales ligados con la brujería, hasta acabar con su vida, por la motivo Philip, lleno de culpa caminó hasta la torre de su castillo y, finalmente, se tiró ante su desesperación. Por lo tanto, después de haber recreado la historia de Philip, el grupo Owen realizo un retrato de su noble inglés, dado éste paso el grupo comenzó la segunda fase del experimento: el contacto.
En el año 1972, el grupo comenzó las reuniones informales invocando su espíritu por medio del pensamiento, incluso algunos miembros del grupo afirmaron sentir una presencia en la habitación, pero no tenían pruebas que fuera el resultado de la comunicación con Philip. Así que cambiaron de táctica y crearon una atmósfera de una clásica sesión espiritista, apagaron las luces de la sala, se sentaron alrededor de una mesa, una noche el grupo recibió la primera comunicación de Philip en forma de golpes sobre la mesa, y no solo eso pues Philip podía crear reales poltergeists, si el grupo pedía a Philip que apagara las luces, se apagaban de inmediato, o diversas pruebas que demostraban que Philip era un verdadero fantasma creado por las mentes de un colectivo.
Finalmente, es claro que hay quienes dicen que no hay pruebas que demuestren la existencia de los fantasmas, pero otras personas están seguras que nuestro inconsciente podría ser responsable de este tipo de fenómenos solo en algunas ocasiones, sin embargo y como en todas las investigaciones no hay explicación lógica, pues la única conclusión segura es que hay muchos fenómenos que no tiene explicación.
Laura Monroy- Frecuencia Cósmica