La tadeísta María José Sánchez brilló al compás del Sanjuanero
Por un lapso de seis meses, María José Sánchez dejó el tutú y las zapatillas, para enfundarse en la falda de satín rotonda en plato y de color que caracteriza el baile típico de la Región Andina colombiana. La pausa implicó dejar por un tiempo Bogotá, donde adelantaba sus estudios de Cine y Televisión en la Universidad Jorge Tadeo Lozano, y practicar por horas con el objetivo de representar muy bien a su departamento.
"Esto fue difícil, pues estaba acostumbrada a bailar en puntas. También hablar con medios fue todo un aprendizaje. Me la pasaba en entrevistas o en desfiles, y obviamente, en presentaciones", comenta a El Espectador, en la edición impresa y digital de este diario.
Aunque no se llevó la corona, María José considera que está experiencia es inolvidable. Retomó sus estudios y sus clases de ballet, porque es lo que más le apasiona desde que tenía nueve años.