Profesor tadeísta Manuel Zevallos hizo parte de la Maratón de Lima
Desde joven, Manuel Zevallos, profesor del programa de Administración de Empresas de Utadeo, tenía una gran admiración por los maratonistas que hacían parte de las olimpiadas de México y Múnich. Así, hizo del deporte un aliado indisoluble en su formación como persona y profesional, a tal punto que siendo estudiante universitario en Perú, su país de origen, comenzó a practicar con disciplina el atletismo, y posteriormente en Colombia, inició su camino hacia este tipo de competencias semiprofesionales, participando en carreras con distancias de diez kilómetros y posteriormente de 21 kilómetros.
Desde hace tres años, Zevallos hace parte de la Maratón de Lima, la competencia de su tipo más importante en el país Inca que abarca un recorrido de 42 kilómetros y congrega a cerca de 16 mil competidores, de los cuales solo participan 3000 en la prueba principal, debido a la demanda física que esta supone: “Escogí esta competencia primero que todo por la compañía de mi familia, así como por la topografía amigable del terreno. No hay muchos accidentes topográficos y es una prueba al nivel del mar”.
Como parte de lo que el profesor tadeísta denomina “primiparada”, su primera participación estuvo marcada por el dramatismo y la descompensación física, debido en parte a la falta de preparación. Sin embargo, su esfuerzo y espíritu guerrero lo llevaron a terminar el recorrido con un tiempo de cinco horas y media. Para el 2015, logró mejorar su tiempo en cinco horas doce minutos, y finalmente en la más reciente versión que se llevó a cabo en mayo de este año, logró terminar la maratón con un tiempo de cinco horas: “Yo encuentro en este tipo de actividades una motivación para seguir mejorando a nivel físico y de salud, y eso poder llevarlo al nivel personal, conocer otras personas, en los círculos familiares y de amigos para incentivar las prácticas saludables”, comenta Zevallos.
Como una de sus próximas metas, el profesor tadeísta planea correr en otras maratones como la de Medellín, razón por la cual no baja la guardia en la preparación física diaria. Para él, ejercitarse gradualmente para competir en las pruebas, así como aprovechar los espacios que brinda la ciudad, son algunos de los consejos para quienes quieran convertirse en deportistas: “Considero que una persona puede comenzar su actividad deportiva en circuitos pequeños, tales como parques, zonas verdes, al tiempo que conoce la ciudad a pie”.
Finalmente, el profesor invitó a la comunidad tadeísta a que fomente y patrocine este tipo de prácticas saludables, a través del deporte, generando incentivos para la participación en eventos deportivos internacionales: “Esta es una motivación adicional que se ve reflejado en un efecto multiplicador de prácticas saludables. Desde la Universidad debemos estar vigilantes, siempre promoviendo los usos saludables del tiempo libre”, resaltó el docente.
