En su más reciente columna en El Nuevo Siglo, Jaime Pinzón López, presidente del Consejo Directivo de Utadeo, analiza la propuesta de que Colombia se afilie a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (Otan).
Pinzón califica en su escrito de “anacronismo”, “necedad” y “demostración de subdesarrollo” la idea de integrarse a este organismo, creado por Estados Unidos y Europa Occidental tras la II Guerra Mundial para frenar el comunismo. En respuesta, la Unión Soviética y los países de su órbita suscribieron el Tratado de Varsovia.
La Otan, insiste Pinzón, no tiene relación alguna con Latinoamérica y ninguna de sus naciones es miembro. Colombia forma parte de la Organización de países No Alineados (Noal), que se conformó justamente para evitar la confrontación con ambos bloques.
El Presidente del Consejo Superior de Utadeo señala que la Otan es blanco de protestas del presidente ruso Vladimir Putin; el electo mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, ha hablado de la necesidad de reformarla, y sus países miembros han sido declarados enemigos por organizaciones terroristas y movimientos políticos.
“¿A quién se le ocurre -pregunta Pinzón- que nos metamos de cabeza en la Otan? Compete aclarar el asunto al presidente Juan Manuel Santos, también Nobel, porque suscribir dicha afiliación sería introducir al país anacrónicamente en camisa de once varas”.