“Colombia ha vivido otra vez esa sombría unión de alegría y muerte que hemos asociado con el fútbol” así inicia el análisis del decano de la Facultad de Ciencias Sociales de la UJTL, Jorge Orlando Melo en su columna de opinión publicada en El Tiempo.
Interrogantes como ¿qué hace que esto ocurra solo en Colombia y no en países con desigualdad o pobreza peores o con tanta gente armada y tanto narcotraficante como aquí? ¿Por qué se concentra la violencia en Bogotá y es menor en ciudades como Medellín y Cali, con tasas de homicidio más altas, con mucha gente armada y con un gusto similar por el trago y la borrachera?
De esta forma, el decano explica los lamentables acontecimientos que han dejado las celebraciones por los triunfos de la Selección Colombia y los datos erróneos que han entregados alcaldes y gobernadores, donde dejan ver que las cifras no son claras y el interrogante que queda es si ¿los muertos tienen que ver con el fúbol o las celebraciones?