"La formación profesional hace la diferencia, especialmente para aprender a pensar"
Desde hace ya varios años, Ángela Carmona, hoy egresada del programa de Diseño y Gestión de la Moda de Utadeo, ha hecho parte de esta industria. Sin embargo, el pasado 8 de agosto, en la ceremonia de graduación de pregrado que se celebró en el Auditorio Fabio Lozano, para ella fue como volver a nacer profesionalmente: “Cuando tenía 17 años pensaba que un título profesional no me iba a ayudar, pero con el paso del tiempo me di cuenta que una formación profesional si hacía la diferencia, especialmente para aprender a pensar”, señala.
Ella, al igual que los más de 600 tadeístas que obtuvieron su título de tecnólogos y profesionales en diferentes áreas del conocimiento, han considerado que la educación es el camino para transformar la vida propia y la de las personas que están en su contexto y en su país; en un mundo en crisis, el saber se constituye en un activo invaluable para superarla.
“Por eso hay que creer en la educación que sucede en espacios variados. Ya sea en un campus universitario, en un curso libre, o en un encuentro de jóvenes poetas en un bar bien cutre del centro de la ciudad. Lugares donde se generen diálogos, donde se escuchen múltiples voces que nos recuerden que somos un punto diminuto en una línea de tiempo infinita. Es por eso que sigo pensando que una de las opciones más certeras para construir una mirada crítica puede darse en las clases de Humanidades o de Semiótica. Durante esas horas podemos comprender que la sociedad es un tejido inacabado donde nosotros, aunque seamos diminutos, intuimos que podemos y debemos actuar”, señaló Carmona en su discurso de graduación (Lea el discurso completo de la tadeísta aquí).
Sus palabras no podrían ser más acordes para la fecha. Desde hace cinco años es docente de Escrituras Creativas para moda y artes aplicadas; es una convencida de que los salones de clase son espacios para generar preguntas, esas que invitan a crear un pensamiento crítico, y a su vez, a respirar como sujetos libres: “hoy todos los futuros graduados estamos respirando: respiramos un poco de la Expedición Botánica, un poco de Ciencia, mucho de Arte y Diseño. Respiramos un poco de mar, un poco de rebeldía respetando siempre las diferencias y respiramos mucha pero mucha libertad: valores que nos acompañaran de aquí en adelante”, añadió.
Pero, luego de graduarse, ¿qué se necesita para ser ese profesional integral que transforma realidades? Para Pastora Correa, directora de los programas de Diseño y Gestión de la Moda, Realización de Audiovisuales y Multimedia y Producción de Imagen Fotográfica, es claro que el mundo requiere de personas con competencias de alta complejidad, en las que no solo se involucre el pensamiento técnico sino también el creativo, la sensibilidad y la intuición.
“La vida en la Universidad no es solo transmitir conocimientos, también se trata de producirlo. Hoy tenemos graduandos con la capacidad de pensamiento crítico frente a las coyunturas que vive la sociedad”, señaló Correa en sus palabras hacia los graduandos. Allí agregó que una de las cualidades que debe tener el profesional es ser humilde y reconocer que el otro tiene la razón y puede modificar los argumentos propios.
Tadeístas que, desde ya, dejan huella
Podría decirse que Ana María Bernal, egresada del programa de Contaduría Pública, es un gran ejemplo de lo que significa ser un graduando destacado, pues, tras desarrollar sus prácticas empresariales en Panalpina S.A., fue contratada por la compañía, aun cuando la vacante no existía: “Ellos vieron mis capacidades, me asignaron más funciones y les gustó mi trabajo. Al final aprobaron la vacante en Suiza y estoy trabajando desde hace un mes en el apoyo de impuestos”, indicó la tadeísta.
Agregó que la responsabilidad más grande, más allá de recibir el diploma, es ejercer con ética la profesión: “representemos a nuestra Universidad con mucho orgullo y dejemos marca en todo lugar que pisemos, que nos recuerden por las maravillosas personas y profesionales en las que nos hemos convertido, unos grandes tadeístas”, fue la invitación que hizo Bernal a sus compañeros de graduación.
Ana María Bernal en su discurso hacia los graduandos
Esta visión la comparte la rectora de Utadeo, Cecilia María Vélez, quien en su discurso a los estudiantes les agradeció la confianza depositada por ellos y sus familiares a Utadeo, al seleccionarla como su alma máter: “con sus proyectos e ideas podrán incidir en las transformaciones de sus contextos, regiones y el país”.
Añadió que nuestros egresados son profesionales que tienen carácter propio, con responsabilidad hacia los suyos y con capacidades de debatir sus argumentos con respeto: “cada uno de ustedes hará honor al título de ser tadeístas”.
Rectora de Utadeo, Cecilia María Vélez
- En estas ceremonias de grado, varios de nuestros tadeístas del programa Ser Pilo Paga obtuvieron su título.
- Claudia Lago, directora de los programas de Relaciones internacionales y Ciencia Política
- Diana Patricia Morales Díaz, jefe de la Oficina de Bienestar, Seguridad y Salud Laboral de Utadeo, recibió su título como administradora de empresas.
