#LosLABS: Odisea, el laboratorio tadeísta de otro mundo
Para conocer el espacio exterior no se necesita viajar miles de años luz, ir dentro de un trasbordador o ser un intrépido astronauta de la NASA. Con la ayuda de Tadeo Lab y su laboratorio Odisea puedes vivir experiencias que son de otro mundo, las cuales se enfocan en la apropiación social del conocimiento en torno al espacio.
Este laboratorio nació en 2015, gracias a una invitación del Planetario Distrital, uno de sus grandes aliados, que tenía como fin convertir la sala cinco de ese icónico escenario capitalino en una experiencia de aprendizaje significativo, en el marco del Año Internacional de la Luz.
Así, en un esfuerzo que involucró a todo el equipo Tadeo Lab, buscaron que los asistentes al lugar comprendieran aspectos complejos como la formación de la luz, a partir de la generación de atracciones y performances basados en una articulación entre el diseño, la tecnología y la ciencia, que ayudara a hacer digerible el discurso científico de la astrofísica: “Nosotros no somos expertos en tecnología espacial, pero sí somos buenos contando las cosas, para que la gente del común las entienda”, comenta Catalina Quijano, directora de Tadeo Lab.
De este modo, en dichas interacciones, le explicaban a públicos de todas las edades acerca de los rangos de luz que, como seres humanos, percibimos y son visibles. Eso que, desde la teoría del color, conocemos como espectro visual. La invitación, desde la entrada a la sala, era a generar intercambios de conocimientos y convertir al público en estrellas que deambulan por el espacio, a partir del uso de luces led que, en su conjunto, accionaban los rangos de luz visible. El éxito fue total, según lo comenta Quijano, pues en solo un fin de semana se logró reunir a más de 1200 personas en dicho escenario.
El eco de su éxito rápidamente los llevaría a ser reconocidos en otros ámbitos de la astronomía nacional; primero, en los festivales de astronomía de La Calera, dirigidos a público infantil, en el que el Lab fue uno de los organizadores en las ediciones del 2015 y 2016, y posteriormente, en 2018, uno de los eventos más importantes de la astronomía mundial tocaría las puertas del Lab, gracias a las recomendaciones dadas por Dani Sierra, quien en ese entonces era integrante del ViveLab de la Universidad Nacional.
Adecuación del salón 5 del Planetario Distrital, en el marco del Año Internacional de la Luz (2015)
Se trataba del ActInSpace, una hackathón que se celebra cada dos años en todo el planeta y que es auspiciada por la Agencia Nacional Europea, el Gobierno francés y Airbus, y que, para el capítulo colombiano, comprende una organización interinstitucional con universidades como la Nacional, Los Andes y Uniminuto. En la edición que se celebró hace dos años, desde Odisea se apoyó el streaming del evento, al tiempo que algunos de nuestros tadeístas tuvieron la posibilidad de ser mentores. De igual manera, Julián Rozo, diseñador del Lab, colaboró en el diseño de la presentación final del equipo ganador a nivel nacional, quienes representaron al país en el evento mundial del ActInSpace, ocupando el tercer lugar.
En el marco de esta competencia internacional nace el Fabspace, una iniciativa en la que se pretende utilizar la tecnología espacial para solucionar problemas a nivel de los territorios, demostrando así que este tipo de artefactos están al alcance de las comunidades. La iniciativa ha sido liderada en nuestro país por Fernando Jiménez y acompañada por otros actores, entre ellos Alfonso Herrera, director de Emprendimiento e Innovación de la Universidad Nacional, y Gustavo Saavedra, de la Corporación de la Industria Aeronáutica Colombiana (CIAC). A partir de esta apuesta se crea el Comité Científico del Sector Aeroespacial, que cuenta con la participación de diferentes referentes académicos del sector a nivel nacional.
Festival de Astronomía de La Calera
En estos escenarios, Tadeo Lab se ha convertido en un socio estratégico en el ámbito del diseño, divulgación y soporte académico, en términos de aplicar las pedagogías de creación del lab a lo que podrían ser apuestas de educación no formal como diplomados, pero también de prototipado. Todo ello enmarcado en una preocupación actual del Gobierno nacional por incursionar en el ámbito de la aeronáutica espacial, que se hace evidente en el “Pacto por el crecimiento y para la generación de empleo del sector de industrias del movimiento”.
“La experiencia con Tadeo Lab ha sido un gran aporte para el desarrollo de proyectos. Uno de ellos fue en la organización del ActInSpace y en la preparación del equipo que representó a Colombia en el evento mundial, en el 2018. La motivación principal para vincularnos al laboratorio fue ver las nuevas capacidades relacionadas con el prototipado y la mente abierta para trabajar en nuevas cosas”, señala Herrera, quien indica que la única manera para que este tipo de apuestas florezcan en la sociedad es articulando esfuerzos entre la academia, el Estado y las empresas.
¿Qué es el Fabspace?
Para este año, entre el 13 y el 14 de noviembre, nuevamente se desarrollará el ActInSpace, y aunque esta vez se hará de manera virtual debido a la pandemia por el Covid-19, el papel de Tadeo Lab será protagónico. De igual forma, el trabajo interdisciplinar e interinstitucional que se ha gestado entre Utadeo y las demás universidades ha llevado a plantear, de la mano con el Gobierno nacional, una versión del ActInSpace colombiano, que se llevaría a cabo en 2021. Mientras eso pasa, otro actor: la Cámara de Comercio de Bogotá también se ha unido a esta apuesta que pretende, en un futuro muy cercano, convertir este proyecto en trabajos de investigación y en patentes conjuntas.
“Queremos comenzar a abrir espacios que no sean tan comunes en la sociedad pero que tengan una gran influencia a nivel país. Por eso desarrollamos un trabajo interinstitucional, en el que el diálogo con las universidades Nacional y los Andes ha sido muy interesante, pues estamos ayudando a encontrar soluciones nacionales en términos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)”, agrega Quijano.
